- El gerente general de Quiñenco, Francisco Pérez Mackenna, conversa con El Mercurio sobre el rol de la banca en la coyuntura. “Creo que los bancos han hecho una tremenda labor. De cada 10 pesos que prestan, nueve provienen de los depositantes. Los bancos no son una caja repartidora de subsidios, porque la plata no es de ellos”, afirma.
Desafíos de Chile ante el desempleo:
- “(El desempleo) es uno de los temas más complejos. La política económica más importante que podemos hacer es buscar creativamente incorporar más sectores a la apertura. Hoy tenemos cerca de un 55% de la economía funcionando, y la movilidad ha caído en 35%, pero tenemos un millón cuatrocientos mil empleos menos y ese es un tremendo problema. Como esta es una crisis de demanda, pero también de oferta, y algunas actividades las tenemos proscritas, hay que buscar la manera de ir incorporando más y más actividades en forma segura. Eso es lo mejor que podemos hacer para mejorar la condición de empleo y que no se pierda el capital humano que se ha construido”.
Rol de la banca ante la crisis:
- “Creo que los bancos han hecho una tremenda labor. De cada 10 pesos que prestan, nueve provienen de los depositantes. Los bancos no son una caja repartidora de subsidios, porque la plata no es de ellos. La primera responsabilidad es garantizarle a sus depositantes que se la van a devolver, y eso implica y los obliga a ser responsables al momento de entregar los créditos. Los bancos han hecho una labor muy destacada, han sido parte de la solución. Son 173 mil créditos cursados en cuarentena, más de US$ 9 mil millones, y apenas un 10% de los casos han sido rezagados, en un contexto donde el desempleo se empina sobre el 11% y los especialistas proyectan una caída de 7,5% del PIB este año. Lo encuentro un gran logro”.
Déficit en el sector público:
- “(El déficit en el sector público se puede cubrir) vía crecimiento y es lo que ha venido haciendo Chile por muchos años. Tenemos que recuperar el crecimiento con más inversión, más compromiso, más empresarios, y medidas de corto plazo. Lejos lo más importante es hacer un esfuerzo por mejorar la tecnología que nos permita asegurar que las personas puedan volver a trabajar en forma segura. Mientras no arreglemos eso, olvidémonos de todo lo demás’.
Escenarios y lecciones a futuro:
- “Yo veo tres escenarios. El actual, que es el del botón de pánico de la crisis y espero que estemos casi al final, la economía de la emergencia. Después vamos a pasar a un escenario, que va a durar un tiempo, y es el de la economía de los temores, principalmente de las personas, y donde creo que vamos a estar el resto del año y probablemente todo el próximo. El tercer escenario es la economía de los anticuerpos, donde ya habremos salido y vamos a haber aprendido lecciones importantes”.
- “Vamos a tener que estar preparados para enfrentar cosas como estas. Las empresas vamos a tener que estar preparadas para ser más flexibles en muchas cosas, como el trabajo a distancia y con eso, la participación de la mujer en la fuerza de trabajo va a aumentar. Va a cambiar la manera en que trabajamos y vamos a tener que adaptarnos, incorporar tecnología y aprovechar las oportunidades”.
Política de los acuerdos:
- “Lo que me inquieta es que nos descarrilemos. Desde los noventa, veníamos caminando muy bien por una línea, con tremendos logros en calidad de vida, en reducir la pobreza y la desigualdad, en crecer. Obviamente había carencias y problemas, pero era un sistema que funcionaba bastante bien y estaba basado en forma importante en el concepto de la llamada ‘política de los acuerdos’. Me gustaría ver que ese espíritu vuelva, porque obliga a la gente a moverse hacia el centro y a ceder. Tenemos que encontrar un acuerdo que nos suba a todos de nuevo al mismo carro, porque cuando eso sucede los resultados están a la vista”.
El Mercurio, 5 de julio de 2020. Artículo completo en:
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