Pensar en el mundo del trabajo en la era post pandemia parece un ejercicio de ciencia ficción. Los cambios que ha enfrentado durante todo este tiempo, muchos de los cuales se encuentran en pleno desarrollo aún, dificultan un ejercicio aterrizado en esta materia.

Pero este escenario desafiante es el que ha motivado a Oxford Economics y Society for Human Resources Management (SHRM), junto a SAP SuccessFactors, a elaborar el estudio “The future of works arrives early: How HR leaders are leveraging the lessons of disruption”, en donde analizan los diversos efectos de la pandemia en empresas con operaciones en una decena de países.

Valerie De La Harpe, gerente de Desarrollo Organizacional de Quiñenco, señala que ante este escenario incierto “durante la primera ola de la pandemia, se vio que el foco de la mayoría de las empresas estuvo en resguardar la salud de todas las personas con las que se relacionan, junto con velar para que, en las industrias que era posible, la cadena productiva se mantuviera funcionando. Ahora estamos entrando a una casi inminente segunda ola y la pregunta que nos debemos hacer es cómo la enfrentaremos desde el punto de vista laboral y qué haremos inmediatamente después”.

En este sentido, De la Harpe afirma que “los equipos de Recursos Humanos deben ser capaces de mirar hacia adelante para poder adoptar las medidas necesarias que les permitan identificar y aprovechar las oportunidades que genere el aceleramiento en las tendencias que está dejando la pandemia”.

Ante esto, y de cara a un nuevo año donde los grandes cambios en el lugar de trabajo continuarán, Oxford Economics y SHRM nos entregan algunos datos clave para que los encargados de Recursos Humanos enfrenten este proceso:

• Programas de desarrollo y sucesión como foco de atención: los programas de entrenamiento están siendo pasados por alto en un momento en el que están siendo más críticos que nunca, a pesar de la motivación de los empleados para volver a capacitarse.
• Fuerza de trabajo en dos niveles: El lugar de trabajo no va a desaparecer. La bifurcación entre las personas que pueden trabajar a distancia y aquellas que deben estar en el lugar de trabajo, crea grandes desafíos para los líderes de RR.HH. y a toda la empresa.
• Justicia social, desigualdad económica y bienestar de los trabajadores: un movimiento mundial en pro de la justicia social está presionando a los líderes para que se centren en las buenas prácticas de contratación inclusiva. Una tarea que se hace aún más urgente por diferencias de equidad dentro de la fuerza de trabajo existente.
• El desafío de la productividad: los problemas inducidos por la pandemia están lejos de terminar. Según reveló el informe de Oxford Economics y SHRM, las personas tienden a ver el mantenimiento de la productividad en las nuevas formas de trabajo como su principal obstáculo.
• Trabajo a distancia como imán de talento: los empleadores esperan que las políticas de trabajo flexible se vuelvan mucho más importante para atraer y retener el talento (de lo que era antes del Covid-19), por lo que las herramientas de colaboración a distancia deben ser el área principal de inversión en tecnología dentro de la compañía.

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